Profesionalizar el servicio en Paraguay para impactar en la sociedad

Dynamus nació hace 25 años con la intención de cubrir una necesidad específica: la tercerización de mercaderistas y reponedores en supermercados. La visión del fundador se tradujo en una idea que fue madurando y evolucionando, hasta abrirse a nuevas ideas de negocios.

Luego, la empresa fue abriéndose a nichos adicionales a los supermercados, posicionándose como tercerizadora de servicios. Esta apertura se dio a partir de la visión de colaborar a la construcción de la sociedad y profesionalizar el trabajo en el país.

“Queremos ser un aporte. Queremos ser parte de esta transición a un Paraguay cada vez más profesional”, enfatiza Francisco Fiegelist, gerente general de la compañía. Nos explica cómo Dynamus trabaja constantemente en buscar nuevos caminos para lograr resultados que respondan a las necesidades de la sociedad, de la comunidad en la que se inserta.

“De alguna manera sentimos la responsabilidad de colaborar y ayudar”, señala. Esta responsabilidad se traduce en el esfuerzo por continuar ampliando los servicios de la empresa y el impacto de estos en los negocios de sus clientes.

Dynamus inició su gestión desde la tercerización en el supermercadismo, hasta abrirse a la tercerización de servicios. ¿Cómo ve actualmente su posicionamiento y apertura a otros mercados?

La evolución partió de la necesidad de la tercerización específica de mercadisticas a la nucleación en una empresa que abarca los 360° de tercerización. Esto va acompañado por todo lo que conlleva ofrecer un buen servicio a las empresas que confían en nosotros para tercerizar su personal.

Hoy, el supermercadismo abarca el 45% de nuestra cobertura. El resto está compuesto por operarios de una planta hasta administrativos, equipo de cuentas, playeros de una estación de servicios, mercaderísticas, financieros o personal vinculado a logística. Todo lo que el rubro de “servicios” hoy conlleva, hoy Dynamus lo puede tercerizar.

¿Cómo ha sido la evolución de Dynamus que menciona, dentro de la demanda de los nichos que atiende?

Fue un proceso de aprendizaje constante. El mercado paraguayo ha evolucionado muchísimo en los últimos diez años, e incluso desde antes. Hoy, las exigencias y necesidades hacen que la tecnología – al ofrecer información de gestión – sea una parte compenetrada. No una tercerización, sino un servicio.

Qué hace la persona, en cuánto tiempo, de qué manera acaba la tarea… comenzó como una tercerización. Hoy se ofrece una atención integral, donde no solo se observa la tercerización, sino cómo generar valor al servicio de la empresa.

En este mercado de servicios que está describiendo, desde la tercerización hasta esta actuación integral, ¿cuáles son las necesidades que cree que toda esta evolución ha despertado?

En primer lugar, esto nació de la profesionalización del mercado paraguayo y profesionales, en general. Empezamos a notar que, dentro de ese profesionalismo, las solicitudes no iban desde “qué se terceriza”, sino qué valor agregado podíamos entregar. Ahí comenzó la evolución del negocio.

Comenzamos a plantearnos cómo alinearnos a la necesidad del cliente, para que la estructura pueda acompañarle sin implicar un costo, sino un beneficio.

De alguna manera, vamos generando nuevas respuestas a necesidades que continúan aumentando.

En general, diría que cada año hay nuevas necesidades y nuevas búsquedas de los clientes por complementar – a través de información, de más gestión, de más tiempo o reducción de tiempo –  costos con beneficios intrínsecos al servicio.

Todo apunta a que el mercado va a convertirse en un servicio más integral, donde las empresas deleguen cierta cantidad de tareas y, por lo mismo, dejen de contar con ciertos funcionamientos internos. Estos se delegarán a la tercerización. 

¿Cómo va respondiendo Dynamus a esta tendencia?

En lo que se refiere a respuestas, apostamos a lo tecnológico. También creemos que el proceso de aprendizaje y evolución – tanto del personal interno como del mercado – está en una etapa de adolescencia-juvenil. Estamos aprendiendo, integrando capacidades a las respuestas que necesitan los clientes.

Cada vez estamos vinculando más la contratación a las necesidades del cliente. Muchas veces, en los procesos internos de la empresa, decimos que la empresa tiene que trabajar de cierta manera y bajo un modelo determinado, y contrata a las personas que van a dar ese servicio a través del modelo interno. Pero se olvida de cuál es la necesidad.

Estamos procurando vincular necesidades de clientes con contrataciones. Cada vez se alinean más esas expectativas y logramos que, desde el inicio, la persona que brinda el servicio esté más conectada con las necesidades del cliente y los procesos internos.

Todo eso, dicho en el marco teórico, va a la práctica, donde tenemos alianzas estratégicas con las tres firmas internacionales que nos ayudan a seguir siendo los pioneros.

Siempre estamos en la revisión constante del mercado. En revisión de las necesidades, para ver si no hay algo que se nos esté olvidando. Es amplia y variada la cantidad de necesidades de los clientes.

No se repite casi ningún día, cada día es muy diferente; todos los días la estructura gira y debe ser dinámica. No puede ser rígida, con procesos establecidos, que creamos únicos. Trabajamos constantemente para que las personas que integran la organización entiendan que hoy puede ser “a” y mañana puede ser “b”. Es parte de la forma de trabajar.

¿Bajo qué pilares estratégicos y qué enfoque se sustenta todo lo que menciona?

Trabajamos con información y conectamos eso con la información del cliente para ver su punto específico de búsqueda. Esa búsqueda nos hace reaccionar a través de nuestros pilares: la cercanía y la tecnología.

La base de nuestro trabajo es asociarnos y acercarnos lo más posible al cliente; hablamos de tecnología a través de la cercanía.

La tecnología distante no sirve, no se adapta. Está detrás de la necesidad real y, finalmente, no muestra la información como se requiere.

Otro eje estratégico se fundamenta en las personas y los recursos, el modelo de contratación. Hay un modelo que no se basa tanto en un proceso interno, como en la vinculación de las personas a las necesidades reales de los clientes.

Estamos trabajando en esto para que nuestro proceso de selección sea cada vez más específico, siendo una experiencia positiva para la empresa y las personas. Siempre decimos que no hay “personas que hacen mal el trabajo”, sino trabajos que no son adecuados para esa persona. Personas que no aplican a un trabajo, para otros son geniales.

Finalmente, otro aspecto que nos ocupa es la expansión y crecimiento: abarcar cada vez más el mercado del trabajo en sí. Creemos que somos una referencia y que podemos ser los pioneros en profesionalizar el trabajo en Paraguay, para que finalmente todos tengan oportunidades.

Oportunidades de acceso al salario mínimo, primero, y de construcción a futuro. Queremos formalizar el trabajo, formalizar el proceso de selección, ayudar a la gente a construir currículum, que tenga sentido y que se pueda entender.

Es todo un proceso educacional del cual queremos ser parte. Creemos que a la sociedad hay que ayudarla también. Nosotros queremos ayudarla.

¿Algo que le gustaría añadir?

Un punto que me parece importante es destacar el crecimiento y el perfeccionamiento del profesional paraguayo. Nosotros fuimos enlanzándonos con eso. Somos parte de ese profesionalismo del mercado, y como empresa hemos abierto puertas para que más profesionales ingresen a él.

Creemos que nada es consecuencia individual, sino que es una consecuencia general.

Como empresa, nos sentimos parte del mercado y nos sentimos ayudados por el mercado.

Hoy, con casi 1.600 colaboradores y creciendo, tenemos una responsabilidad social muy grande. Queremos ser un aporte. Queremos ser parte de esta transición a un Paraguay cada vez más profesional. De alguna manera sentimos la responsabilidad de colaborar y ayudar.

Trabajamos en esto, buscando los caminos. A veces, no acertamos. Pero lo intentamos.

¿Algún mensaje final que quisiera añadir?

En Dynamus aplicamos constantemente la metodología del cambio. Es muy importante entender esto: nada se repite. Los procesos técnicos y de producción tienen modificaciones constantes, más aún cuando hablamos de empresas de servicios.

Por ello, no hay que cerrarse. Hay que abrir expectativas, abrirse a la tecnología, modernizar el pensamiento. En nuestro caso, somos una empresa que quiere trabajar en el cambio. E invitar al mercado, a profesionales y jóvenes a también permanecer abiertos a ese cambio y adoptar esta visión de innovación.