“La evolución del presente exige que todas las empresas utilicen tecnología”, nos comenta en esta entrevista la CEO de la empresa SSC, Katherine Colombino. Gracias a esta actitud que se adhiere a las herramientas tecnológicas disponibles, los negocios pueden alcanzar mejores resultados.
Ahora, la cuestión está en que las empresas vayan interiorizando esta cultura de la innovación y considerando los productos tecnológicos que puedan acompañar su proyección de crecimiento. “Si uno piensa en un negocio rentable a largo plazo, tiene que pensar en herramientas tecnológicas”, según Katherine Colombino.
¿Cómo las empresas que aplican tecnología pueden ingresar a una cultura de la innovación?
En esta época se hace imprescindible ser una empresa que entra en la tecnología; no es cuestión de elección. Porque, si no estás utilizando tecnología, la empresa queda en el pasado. Hay que evolucionar, y la evolución del presente exige que todas las empresas utilicen tecnología.
Las empresas que no utilicen tecnología, al comenzar a hacerlo van a estar innovando dentro de su empresa. Las que ya están utilizando tecnología, lo que no deben hacer es quedarse en el tiempo. Ahora surgen herramientas innovadoras.
También hay un punto muy importante que consiste en la parte humana. Hay que pensar que las personas también van evolucionando, no solo las herramientas, las máquinas o los procesos tecnológicos.
Hace falta personas con visión de innovación para que se pueda implementar y mantener continuamente ese proceso de innovación. La innovación no es algo estático, es un proceso continuo.
Hay que intentar tener una diversidad de visiones dentro de la empresa, para responder a esto.
Las empresas que entran dentro de este proceso de innovación tecnológica, ¿cómo pueden crecer en competitividad y sobresalir en el mercado?
Al estar dentro del esquema actual, dentro del área tecnológica, obviamente la parte humana no se reemplaza. Es necesario tener personal capacitado para dirigir ese avance.
Gerentes que utilicen la tecnología que tienen. Por ejemplo, ¿de qué sirve comprar un ERP de última generación si el gerente sigue usando planillas de Excel? De nada. Entonces, es importante tener personal capacitado para usar las herramientas para lograr los objetivos de la empresa.
Por ejemplo, herramientas que ayudan a medir los KPI, o la productividad, el nivel de ventas, etc. Productos como estos pueden ayudar a una mejor gestión gerencial.
Ud. Tiene publicado un best seller en Amazon y suele escribir sobre la resiliencia, la adaptabilidad a los cambios, etc. Estos consejos de flexibilidad y fortaleza, ¿cómo cree que pueden aplicarse a la implementación tecnológica de las empresas, para mejores resultados?
Hay dos perfiles bien diferenciados en las empresas: las personas son flexibles o son adaptables. Son conceptos diferentes que se manejan en innovación. Hay que tener cuidado, porque ambos perfiles son necesarios. Hay que hacer un balance al elegir personal calificado tanto flexible como adaptable.
En cuanto a la resiliencia como empresa, esto se inicia ya con una posición financiera que viene de la cultura gerencial de la empresa. Del cómo estamos preparados para enfrentar periodos en los que la venta es baja, por ejemplo.
Durante la pandemia se cerraron muchos negocios que viven del día a día, que en ningún momento pensaron pasar por un periodo tan largo de inactividad. Siguiendo este ejemplo, en nuestro caso, no tuvimos que dejar ir personal, porque pudimos responder a las circunstancias.
Estas actitudes hacia la tecnología e innovación, ¿cómo se están presentando en el mercado local, en la búsqueda del desarrollo de un óptimo clima de negocios?
Hay mucho movimiento, en muchos lugares. Veo empresas privadas y estatales, sobre todo la UIP con el programa para Pymes, que apuntan a varios aspectos, principalmente a la educación financiera y al manejo de negocios.
Entonces, hay un movimiento general que se está imponiendo, donde hay facilidad para encontrar recursos donde antes no había. Hay un gran apoyo a Pymes y Mipymes, que antes no se veía.
Uds., como empresa, ¿cómo están acompañando a sus clientes a la hora de adoptar una mirada más innovadora?
Tenemos que estar en línea con el producto que ofrecemos. Si hay una innovación del producto que ofrecemos, debemos ser los primeros en enterarnos. Y, obviamente, en dar a conocer a nuestros clientes, sugiriéndoles las mejoras que pueden incluir tanto dentro de sus procesos como de sus sistemas o de la parte tecnológica propiamente dicha.
Así, nos convertimos no solo en vendedores e implementadores sino en asesores integrales de toda la parte tecnológica de la empresa. Así estamos acompañándoles.
Desde su punto de vista, ¿cuáles cree que son algunas oportunidades que podrían ir dándose en cuanto a tecnología?
Estamos en un clima muy tenso. Todos estamos observando con precaución, sobre todo en lo relativo a negocios de inversión. Una sensación de espera, a ver qué sucede. Creo que habrá una retracción en las ventas por la situación de guerra que se está dando, que conlleva a la suba del dólar, suba del precio del petróleo, etc.
Habrá mucho movimiento de los mercados y esto lleva a que el consumidor paraguayo se retraiga en el gasto. Es un factor a tener en cuenta. No hay una visibilidad clara del término de este contexto.
Pero, si no se hubiera dado este escenario, yo hubiese dicho que este año sería de recuperación en un, aproximadamente, 60% de la actividad de nuestro país.
Considerando una potencial retracción en inversiones, en este caso hablamos del rubro tecnológico, ¿diría que es una acción válida o recomendaría continuar invirtiendo en tecnología?
Recomendaría inversiones en el área tecnológica porque eso nunca es una pérdida. Siempre es, justamente, una inversión. No pasa de moda.
Pensando en un negocio a largo plazo, debe pensar en proyecciones a largo plazo. Sí, sé que habrá más prudencia. Pero no creo que ataque directamente al área tecnológica.
¿Algún mensaje que quiera dejar a las empresas?
Que se embarquen, si no están subidos al barco del área tecnológica. Es palpable: las empresas que no están, tecnológicamente hablando, en la cima de la ola, se dirigen al fracaso. Van a cerrar, tarde o temprano.
Si uno piensa en un negocio rentable a largo plazo, que pueda manejar y controlar, tiene que pensar en herramientas tecnológicas.