El síndrome del impostor: ¿lo sufres?

¿Te has sentido indigno de tu puesto de trabajo, o incómodo al recibir elogios de colegas? Si así es, no estás solo. El patrón psicológico del síndrome del impostor está muy extendido, y la mayoría de las personas lo experimentan de alguna forma a lo largo de sus carreras.

Resume.io preparó una infografía  que proporciona una guía útil para identificar las diversas manifestaciones del síndrome del impostor y cómo superarlo potencialmente.

¿Qué es el síndrome del impostor?

Las personas que padecen el síndrome del impostor dudan de sus habilidades y logros, viven con el temor de ser expuestos como no dignos de su puesto e incluso restan importancia a su éxito, atribuyéndolo todo a la suerte o la buena fortuna.

Diagrama del síndrome del impostor

Estos sentimientos, que primero se conocieron colectivamente como “fenómeno impostor”, se introdujeron en un estudio de 1978 de 150 mujeres de gran éxito. Hoy en día, tenemos una visión aún más matizada de cómo los sentimientos de ansiedad e insuficiencia pueden afligir a las personas en un entorno profesional.

Arquetipos del síndrome del impostor

De acuerdo con la Dra. Valerie Young, una destacada experta en el tema del síndrome del impostor, estos sentimientos de duda sobre uno mismo no son válidos para todos.

Estos son los cinco tipos diferentes de síndrome del impostor:

1. Experto: Esperas saberlo todo y te avergüenzas cuando no lo sabes.
2.  Solista: Crees que el trabajo debe realizarse solo y te niegas a aceptar ningún crédito si recibiste algún tipo de ayuda.
3. Genio natural: Te dices a ti mismo que todo debe manejarse con facilidad, de lo contrario no es “talento natural”.
4. Superpersona: Sientes que deberías poder sobresalir en cada rol que asumas en tu vida.
5. Perfeccionista: Te pones estándares increíblemente altos y te castigas cuando no los alcanzas.

Comprender los diferentes tipos de síndrome del impostor es un primer paso importante, ya que cada manifestación requiere un conjunto de herramientas único de soluciones para ayudar a superar esta trampa psicológica común que experimentan los profesionales.

“Juntos, tenemos la oportunidad de construir entornos corporativos que fomenten un sentido de pertenencia y disminuyan la experiencia del síndrome del impostor para las mujeres en nuestros lugares de trabajo” Laura Newinski, vicepresidenta de Estados Unidos y directora de operaciones de KPMG

Matar la duda de uno mismo

Si bien el síndrome del impostor puede afectar a cualquier persona, se ha demostrado que las mujeres lo experimentan con más frecuencia, incluso una vez que han experimentado altos niveles de éxito en su carrera.

Un estudio reciente de KPMG de 750 mujeres ejecutivas de alto rendimiento encontró que:

El 75% había experimentado el síndrome del impostor en algún momento de su carrera.

El 81% de estas mujeres también cree que se ejercen más presión sobre sí mismas que sus homólogos masculinos.

Aunque se ha avanzado, la falta de diversidad en el nivel de la “C-Suite” (ejecutivos senior) sigue alimentando algunos de estos sentimientos. El 32% de las mujeres se identificaron con el síndrome del impostor porque no conocían a otras personas en un lugar similar a ellas ni personal ni profesionalmente.

Cuando se trataba de combatir los sentimientos de inseguridad, muchas mujeres encontraron apoyo dentro de su red y organizaciones:

El 72% dijo que recurrió a un mentor o asesor de confianza para obtener ayuda y consejo cuando la duda se apodera

El 54% recibió apoyo y orientación de los gerentes de desempeño.

Crear activamente una cultura que apoye las conversaciones honestas en el lugar de trabajo es clave para ayudar a las personas a acabar con las dudas profesionales.

Fuente:  Artículo redactado por Nick Routley para Visual Capitalist